Facebook afirma que algunos aspectos de su experimento sobre el estado emocional de sus usuarios “debieron haberse realizado de otra manera”.
Como puede que tener el consentimiento por parte de los usuarios antes de manipular las noticias que reciben para comprobar que si son más tristes, alegres o disparatadas afectaría a su estado de ánimo, parece que sea uno de los aspectos que deberían haberse realizado de otra manera.
Pues no van por ahí los tiros.
El pasado jueves. Mike Schroepfer, Director de Tecnología en Facebook, dijo que sus empleados no estaban preparados para el alboroto que se produjo al hacerse público su estudio sobre el contagio de sentimientos. Facebook se ha tomado muy en serio las críticas y admite que quizás había mejores maneras de realizar el experimento:
“Por ejemplo, debimos haber considerado otros formas no experimentales de realizar la investigación. La investigación también se habría podido beneficiar de una supervisión más extensa por parte de un grupo mayor y más experimentado de investigadores. Por último, al publicar el estudio, no fuimos capaces de comunicar claramente que y porqué lo hicimos”.
Por ejemplo, en vez de intentar controlar las emociones cambiando las noticias que leen los usuarios, podían haber usado una metodología diferente como la que cita Schroepfer. Ésta consiste en estudiar la sincronía de las emociones en relación con el mal tiempo meteorológico. De esta manera, no se manipula directamente a los usuarios.
Facebook ha decidido realizar algunos cambios en sus próximas investigaciones.
– Directrices: Los investigadores deben tener claras directrices, y las futuras investigaciones que traten sobre temas “muy personales”, pasaran una revisión especial antes de que los investigadores comiencen el trabajo.
– Examen: Facebook ha creado un nuevo grupo de control, que examinará las investigaciones que realicen. Este incluirá investigadores experimentados, ingenieros, abogados, y los equipos de privacidad y política empresarial.
– Formación: Los nuevos ingenieros deben realizar un cursillo de seis semanas en el que se les instruirá sobre estos temas, y además se añadirá al curso anual sobre seguridad y privacidad que todos sus empleados realizan.
– Web de investigación: Las investigaciones académicas de Facebook se publicarán en una única web.
No sabemos si Schroepfer pretendía disculparse, pero lo dudamos ya que no tocó el tema más candente: más de un millón de usuarios vieron modificados su newsfeeds sin su consentimiento. ¿Os suena a vosotros como una disculpa?
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